Este poema pertenece al poeta peruano: Juan José Lora (1902-1961)
Sea hoy, mi compasivo ruego
Por el viejo filosofo eleusino
… Por el perro que ladra en el camino,
Por el peñasco que deciende, ciego.
Piedad, Señor, piedad para la pena
Que hizo vibrar el hierro al asesino,
Para el vino maldito…para el vino
Cuyo sorbo final esta en el Sena.
Y para el pensamiento que en la noche
Sin bordes de la Nada quedo preso
Antes de hallar su verbo cristalino.
Como la flor helada antes del broche,
Como el amor extinto antes del beso,
Como el canario muerto antes del trino..