uno se despide insensiblemente
de pequeñas cosas;
lo mismo que un arbol en tiempo de otoño
muere por sus hojas.
Al fin la tristeza es la muerte lenta
de las simples cosas,
de esas cosas simples
que quedan doliendo en el corazon.
uno vueve siempre a los viejos sitios
donde amo la vida
y entonces comprende
¡como estan de ausentes las cosas queridas¡
Por eso muchacho no partas ahora
soñando el regreso
que el amor es simple
y a las cosas simples
las devora el tiempo.
¡Demorate aqui en la luz mayor
de este medio dia
donde encontraras
con el pan al sol la mesa tendida.